
A ‘Los Reyes del Hachís del Estrecho’ se les atribuye una fortuna de 30 millones de euros
Isco Tejón, también en libertad, volverá a sentarse en el banquillo de los acusados por blanqueo de capitales
Isco y Antonio Tejón se criaron en el barrio pesquero de La Atunara, en la gaditana localidad de La Línea de la Concepción. De orígenes humildes, han levantado un imperio que algunas fuentes cifran en más de 30 millones de euros a pesar de que su vida laboral es prácticamente inexistente.
Ambos hermanos fueron fichados en su día por ‘El Messi del Hachís’, fugado de la justicia, para introducir esta droga en narcolanchas a través de las costas de La Línea. Pronto se dieron cuenta de que aquello era muy rentable y se independizaron, creando su propia organización. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad los sitúan como líderes de una red criminal perfectamente estructurada. Tras Isco y Antonio, una legión de fieles y delincuentes a sueldo, desde lugartenientes a pilotos de narcolanchas, porteadores, conductores, vigilantes…
Ninguno de los dos hermanos ha escatimado además en gastos y ostentación: viviendas y coches de lujo, viajes exclusivos, joyas, fiestas y vestidores de infarto. Mujeres y amantes han sido además una constante en la vida de los Tejón, todas ellas con un tren de vida inalcanzable. A algunas de ellas y a familiares y allegados de los Tejón le suele ‘sonreír’ la fortuna al ganar incontables premios de lotería y cupones de la ONCE que los investigadores tienen claro que son utilizados para blanquear el sucio dinero del tráfico de hachís.
No obstante, Antonio ha mantenido siempre un perfil más bajo, lejos de la ostentación de la que ha venido haciendo gala su hermano mayor, con videoclip musical incluido cuando era uno de los narcos más buscados del país. Le perdían además las redes sociales aunque ahora parece haber aprendido la lección.
Otra muestra de la elevada capacidad económica de los Tejón es, por ejemplo, la contratación, por parte de Isco, del abogado Gonzalo Boye, que ha defendido al capo de la droga Sito Miñanco y también lleva la de Carles Puigdemont, una minuta que pocos se pueden permitir.
Por cierto, Isco, que fue el único condenado por narcotráfico en un macrojuicio el año pasado, está también en libertad aunque tiene más frentes judiciales. Deberá sentarse nuevamente en el banquillo en un juicio por blanqueo de capitales procedente del narcotráfico.